TARZAN Y LA CIUDAD PERDIDA

Tarzan en el cine


Tarzan y la ciudad perdida

Esta es la última vez que se ha llevado el mito de Tarzan al cine puesto que no tenemos en cuenta las películas de Tarzan de Disney en dibujos animados. Casper Van Dien es el actor que se encarga de personificar al Hombre Mono, Jane March a Jane Porter, Steven Waddington al perverso Ravens, Winston Ntshone al mágico Mugambi, Rapulaba Seiphemo a Kaya e Ian Roberts al Capitán Dooley. Se trata de una película realizada en 1998 en cinemascope y color dirigida por Carl Schenkel.

Las críticas recibidas no son buenas, hablando de la inexpresividad del rostro de Tarzan y dejándola en el olvido como una película más de los miles que existen sobre temas selváticos. Sin embargo, tenemos que rescatar los valores positivos, que los tiene, considerando el mito de Tarzan y viéndola bajo el punto de vista de alguien al que le gustan las historias de Tarzan.

Bajo ese punto de vista, es de agradecer que antes de empezar la película y las letras de crédito, se explica en texto que aparece en la pantalla la historia de Tarzan y su destino final en el presente, en tierras inglesas. Lo que se cuenta entronca perfectamente con la idea original de Edgar Rice Burroughs que pocas veces ha ocurrido en los guiones de Tarzan para el cine. Por ello la película se ve con agrado, agradeciéndose la acción a ritmo apropiado y no acelerado como suele ocurrir últimamente en las películas de aventuras. Los rostros de los personajes principales, Tarzan, Jane, Mugambi, Kaya, íncluso el de Ravens en su papel de asesino avaricioso son agradables de ver. La fotografía en cinemascope recoge bellos paisajes rodados en la propia Africa y la música del film está en consonancia con cada una de las escenas. Es en definitiva una película que el aficionado a las aventuras del héroe de Burroughs, puede ver con agrado.

La pega que hay para mi es que es una lástima que el cuerpo de Tarzan esté muy bien formado, para mi gusto más agradable que el de otros tarzanes que se han visto en la pantalla, pero tiene una gran pega, el actor sólo mide 1.77 centímetros y la mayoría de Tarzanes de la pantalla miden como mínimo (Gordon Scott) 1.90 cms. de estatura. Eso hace que en muchas escenas se vea a Tarzan al lado de algunas personas y casi siempre él es el más bajo. Eso no se corresponde para nada con las descripciones del Tarzan de Burrough que tiene una figura alta y poderosa.

TARZAN Y LA CIUDAD PERDIDA La película comienza con una secuencia oscura, poco iluminada al ocurrir por la noche, en la que vemos como cazadores, hombres blancos, están robando sus tesoros a una tribu cuyo jefe se llama Mugambi. La fuerza de los rifles les da la ventaja a los hombres blancos que están saqueando y robando los tesoros de la tribu hasta que uno de ellos descubre una especie de amuleto y al enseñárselo al jefe éste da la orden de abandonar todo y marcharse, incendiando las cabañas para dejar ocupados a los indígenas mientras se van.

Muy lejos de allí, en Inglaterra le están dando una fiesta a John Clayton, Lord Greystoke por su futura boda con Jane Porter, pero éste tiene una visión, ve la escena de su amigo Mugambi y decide que tiene que regresar a Africa. Así se lo comunica a Jane, su prometida, que se revela pues estaban a punto de casarse. Pero él está decidido a posponer la boda y en la siguiente secuencia le vemos a bordo de un barco fluvial en el centro de Africa.

Tarzan está de nuevo en la selva y cuando abandona el barco del Capitán Dooley se dirige al poblado de Mugambi donde es recibido y donde le explican que hombres blancos han saqueado el pueblo y descubierto una de las joyas de Opar al robarle un plano y un amuleto al fallecido padre de Kaya, uno de los jefes de la tribu. Si descubren la ciudad perdida, Africa se llenará de ávidos cazadores y todo tipo de personas sin escrúpulos buscando tesoros. Tarzan, que todavía va vestido con ropa europea acude al campamento de Nigel Ravens que es quien ha cometido los saqueos y le advierte del peligro de descubrir al mundo la existencia de la ciudad perdida de Opar, pero Ravens le contesta que él, John Clayton de Graystoke es un hombre culto y entenderá por los planos que se trata de la cuna de las civilizaciones, pero John le dice que esos planos fueron robados del cadáver del padre de un amigo suyo. Ravens insiste en que eso pertenece a la ciencia, que es un gran descubrimiento y que él lo sacará a la luz antes de que otro lo haga y viendo la oposición de John Clayton, a quien Ravens recuerda por haber escrito un artículo sobre él, de cómo heredó el apellido Greystoke, encontrado en la selva donde se crió entre monos, saca una pistola pero un rápido movimiento de John lo desarma y le advierte que sino se va ahora mismo de Africa se tendrá que atener a las consecuencias.

Un grupo de cazadores es atacado por enormes monos que aparecen liderados por Tarzan que profiera su alarido característico (diferente del que se hiciera famoso en las películas de Johnny Weissmuller) que aún conserva el pantalón de su traje europeo pero ya va con el torso desnudo. Jane Porter llega en el mismo barco fluvial que Tarzan y se dirige al poblado ayudada y guiada por el capitán del barco que le dice que se quede en el hotel que el hará llegar la noticia de su llegada para que Tarzan acuda. En el hall del hotel de cuarta categoría pero el único que hay se encuentre con Ravens quien impresionado por la belleza de la dama intenta quedar con ella para cenar, pero un esbirro suyo entre y le hace salir para explicarle que sus hombres han sido atacados por grandes monos liderados por un hombre blanco que se balanceaba por los árboles como los propios monos. Ravens se enfurece y le deja con la palabra en la boca pues imagina de quien se trata.

Tarzan acude a su cita con Jane avisado por el capitán del barco y aprovecha para dejar sueltos a todos los animales que Ravens ha cazado creándose un algarabío tremendo. Por otra parte, ha dado órdenes a sus secuaces de que vayan a la habitación de la chica y maten a Lord Greystoke que seguro está allí y a la chica se la traigan viva. Jane está en ropa interior de la época disponiéndose a acostarse pero Tarzan, que antes de entrar al hotel ha oído hablar a los hombres de Ravens y se ha enterado de sus planes, entra por una ventana y ante la sorpresa de ella, se besan y él le explica que se vista que tienen que irse, saliendo por la ventana de manera que cuando llegan los hombres de Ravens se encuentran la habitación vacía y cuando le comunican al jefe lo sucedido, ven como en el río fluvial se escapa Tarzan y Ravens les dice a sus secuaces que ya se ocupara de Lord Greystoke más adelante.

TARZAN Y LA CIUDAD PERDIDA Tarzan y Jane viajan en el barco fluvial y su amigo el capitán Dooley les deja en el lugar que desean. Tarzan coge a Jane en brazos con una liana que les lleva desde el barco a tierra firme. Allí se encuentran a un elefante al lado de su cría que ha caído en una trampa y Tarzan coge una liana y la ata al elefante y a la valla de la trampa pero la liana se rompe. Sin embargo, Jane saca su revólver dispara contra las cadenas que cierran la valla y libera así de fácil al elefantito ante el asombro de Tarzan. Después llegan a un paraje natural precioso con una cascada y Tarzan lo cruza con un par de lianas pero al hacerlo Jane se cae en el medio al cambiar de liana y Tarzan se lanza al agua para rescatarla, besándose al salir a la superficie. Después llegan a la casa en los árboles que está toda desordenada y donde Tarzan le muestra a Jane los libros de su padre y le explica que fue en ellos donde con mucho esfuerzo aprendió a leer él solo y aparece por primera vez en escena Cheetah que le entrega una flor a Jane.

Poco después John Clayton y Jane Porter se hallan bailando un vals de Johann Strauss cuando de repente Tarzan se detiene, duda, pero sigue bailando. Jane le pregunta qué pasa pero Tarzan contesta que nada y está muy lejos. En realidad lo que ocurre es que la expedición mandada por Ravens están demoliendo del barco fluvial a tiro de ametralladora.

A la mañana siguiente en la cabaña de Tarzan, Jane se despierta apaciblemente y está merodeando por la casa cuando ve en frente suyo a una enorme serpiente. Da un alarido que oye Tarzan que en ese momento regresaba en canoa por el río tras haber recogido alimentos. Al oír el grito Tarzan se apresura y cuando llega y ve lo que ocurre, coge la serpiente tranquilamente y le dice a Jane: "Esta es Tonga, una vieja amiga", ante el asombro y medio enfado en broma de Jane. Después la deja con cuidado en el exterior de la cabaña cuando oyen el vals de Straus y al entrar ven a Cheetah que se ha puesto un vestido de Jane y está dando vueltas encima de la mesa, huyendo después por las ramas y provocando la risa de Tarzan y Jane que se ve interrumpida por el son de unos tambores y Tarzan le dice a Jane que tienen que irse.

Atraviesan parte de la selva y van subiendo por una montaña cuando Tarzan le dice a Jane: "No muestres miedo. Ellos respetan el valor por encima de todo" y Jane le contesta: "Entonces no puedo desmayarme". Al rato están rodeados por numerosos indígenas pintados y armados para la guerra. Uno de ellos se acerca a Jane por detrás y la toca pero esta se gira y de un manotazo lo tira al suelo ante la carcajada de todos los demás y entonces se da cuenta Jane de la situación y le dice a Tarzan dándole un golpe en el estómago y abrazándolo: "Me podías haber avisado de que eran amigos".

Mugambi, el jefe de la tribu y amigo de Tarzan les da la bienvenida. Kaya, uno de los jefes explica que los Misungu (piel blanca) están invadiendo el terreno y van a descubrir Opar y es el momento de atacar. Tarzan dice que no se arreglará el problema con una lucha pero Kaya le contesta que Tarzan se ha vuelto blando desde que tiene mujer. Además lo llama Misungu y Tarzan se levanta para pelear con Kaya ofendido porque en el idioma de Kaya eso es lo más bajo, pero Jane lo detiene y le dice que aunque le sepa mal ellos son Misungu (de piel blanca). Jane le dice a Tarzan que ella se puede ir con el capitán Dooley al poblado mientras él ayuda a Mugambi, pero éste les explica que han encontrado al capitán y a su hombre por quien pregunta Tarzan al ser un viejo amigo, muertos y el barco destrozado.

Tarzan y Jane salen en busca de la expedición de Ravens y cuando los encuentran al borde de un precipicio Tarzan le dice a Jane que se quede donde está con el revolver preparado. Se separan y Jane se queda sola encontrándose al rato de frente a una leona, por lo que no le queda más remedio que disparar dos tiros asustando a la leona que escapa pero alertando a los hombres de Ravens que se dividen y persiguen a Jane hasta que la alcanzan y empiezan a dispararse con ella. Finalmente Jane los despista pero se encuentra enfrente de una cobra venenosa que la va a morder. El grito vuelve a alertar a Ravens y en el momento que la cobra se lanza a su mordisco el brazo de Tarzan se interpene y le muerde en la muñeca. Rápidamente le pide a Jane que le haga un torniquete y escapan pero Tarzan llega un momento que no puede luchar contra el poderoso veneno de la serpiente y cae desmayado al pie de un árbol. Jane, viendo que Ravens se acerca con parte de sus hombres se aleja y luego dispara para que no encuentren a Tarzan cosa que representaría su muerte segura. Uno de los hombres de Ravens ha querido tocar la serpiente y es mordido y pese a que la mayor parte del veneno lo lleva Tarzan en sus venas, al rato el hombre cae muerto. Tarzan está a punto de ser descubierto pero un enjambre de miles y miles de abejas lo empiezan a cubrir de manera que cuando Ravens y sus hombres pasan por el árbol no lo distinguen aparte de que les da miedo de ver tantas avispas juntas. Cuando Ravens se aleja las avispas van dejando a Tarzan y se concentran hasta que adquieren la forma de Mugambi que acercándose a Tarzan le hace unos pases hasta que lo devuelve a la vida dejándolo dormido al pie del árbol.

Jane ha sido finalmente capturada por Ravens al llegar ésta, en su huida, ante un enorme precipicio y cuando Tarzan se despierta de su letargo se encuentra al pie del árbol vestido por primera vez en la película con el típico taparrabos y Mugambi le ha dejado un carcaj con flechas, un arco y un bolsa de cuero llena de agua. Tarzan se levanta y dice: "Gracias Mugambi" y emprende la marcha siguiendo el rastro de la expedición de Ravens que atraviesa la selva, y una enorme pradera hasta llegar al pie de una montaña y subiendo por ella llegan hasta una lugar donde hay como una especie de monumento escavado en la roca que Ravens reconoce gracias al amuleto que encontró como la puerta de la ciudad de Opar. Rápidamente ordena a uno de sus hombres que lo disponga todo para dinamitarla y mientras, Tarzan, cada vez está más cerca de ellos.

TARZAN Y LA CIUDAD PERDIDA Los hombres de Mugambi capitaneados por Kaya han llegado tras la expedición de Ravens y avisan a los porteadores para que escapen. Estos lo hacen y los guerreros comienzan su ataque disparando sus flechas contra Ravens y sus secuaces. En ese momento estalla la dinamita y aprovechan para entrar por el túnel que se ha creado. Una vez que Ravens y sus hombres junto con Jane, que va maniatada, entran en el pasadizo que conduce a Opar, se dan cuenta que los guerreros de Mugambi han cerrado la entrada con rocas. Por la parte de afuera los guerreros terminar de cerrar la entrada a Opar en el momento en que llega Tarzan que quita las rocas. Kaya le dice que todo el que entre en el pasadizo a la ciudad de Opar morirá pero Tarzan no está dispuesto a abandonar a Jane y se coloca el carcaj con las flechas y se dispone a entrar diciéndole a Kaya que haga lo que tenga que hacer. Kaya como respuesta le entrega una gran cuerda enroscada y Tarzan se adentra en el pasadizo. Mientras, todos los hombres de Ravens y Jane caen por una especie de túnel que se abre a sus pies deslizándose vertiginosamente hacia abajo y cayendo finalmente en una gruta interior. De allí, por otro pasadizo, van a parar a una nueva gruta en la que hay una puerta con inscripciones. Ravens consigue abrirla, y pasan al interior de un nuevo pasadizo pero antes de que pase el último, Tarzan ha recorrido los mismo pasos y llega a tiempo de lanzarle una flecha al último de los hombres de Ravens y el resto empiezan a disparar con la ametralladora pero Jane está feliz porque ha visto que Tarzan sigue vivo. Con la siguiente flecha Tarzan consique que la puerta se cierre y mientras intenta abrirla, Ravens y los demás, andando por el nuevo pasillo de la gruta, se les abre el suelo y caen a un lago interior.

Ravens sabe que Tarzan les va a seguir así que prepara una trampa atando a Jane a una roca y poniéndole un cartucho de dinamita en el pecho con una mecha que enciende amenazando a Clayton para que salga de su escondite. Todos están preparados para disparar pero el que asoma por el agua es Kaya y Tarzan aprovecha para quitarse de en medio a los dos hombres que están al lado de Jane, cogiendo el cartucho de dinamita de su pecho y lanzándolo contra Ravens y sus hombres pero Ravens lo coge a tiempo de lanzarlo contra Tarzan y Jane que apenas tienen tiempo de refugiarse ante la explosión y derrumbe de rocas que provoca.

Dejando atrás a Tarzan y a Jane a quienes da por muertos, Ravens y los suyos salen del pasadizo a la luz del día encontrándose frente a una gigantesca pirámide, la ciudad perdida de Opar. Todos se dirigen hacia la gran pirámide y antes de llegar al pie de las de las escaleras de acceso hay como un pasillo formado por guerreros de piedra cuyas cabezas llevan extrañas máscaras. Igualmente, en lo alto de la parte de acceso al primer nivel y puerta de entrada de la pirámide, hay otros guerreros negros con máscaras que están constantemente haciendo resonar unos enormes tambores. Ravens ordena a uno de los suyos que prepare un cartucho de dinamita y lo lanza contra la puerta de acceso pero Mugambi se halla ante la puerta y alzando la mano se crea una muralla invisible entre él y la explosión. En ese momento salen de la cueva Tarzan, Jane y Kaya que ven a lo lejos la pirámide y piensan que es demasiado tarde.

Ravens saca el revólver y le dispara a Mugambi ante la puerta del entrada al templo y éste sonríe invulnerable a las balas y a continuación se transforma en una cobra gigantesca que ataca a Ravens y a los cinco hombres que quedan. Pero de pronto la cobra desaparece y Ravens y los suyos se encuentran con la puerta abierta y ante ellos una mesa llena de montones de joyas, oro y piedras preciosas. Mugambi se aparece ante Tarzan, Jane y Kaya y les dice que por fin han llegado a la ciudad de Opar, pero Kaya contesta que son sólo tres y los enemigos llevan rifles. Mugambi le contesta que él tiene a sus guerreros y al preguntar Kaya de qué guerreros habla, Mugambi saca de una bolsa unos huesos que al lanzarlos al suelo, cada uno de ellos se transforma en un guerrero como los que están formando el pasillo de entrada a la ciudad de Opar.

Mientras los hombres de Ravens empiezan a recoger el tesoro en sacos peleándose entre ellos por la posesión de algunas piezas, Tarzan encabeza a Kaya y sus guerreros junto con Jane y al llegar a ellos lanza su grito de ataque que asusta a sus enemigos y empieza la lucha. Ravens dispara a uno de los guerreros que rápidamente se desintegra volviéndose a convertir en el hueso que era inicialmente, y lo mismo pasa con un segundo guerrero, pero poco a poco las fuerzas se van nivelando y Ravens huye al interior del templo seguido por Tarzan hasta llegar a una sala interior donde empiezan a luchar con lanzas que jan cogido de las paredes hasta que Ravens cae al suelo y tienta a Tarzan diciéndole que entre los dos se podrían repartir todo y ser los dueños de Africa. Tarzan se niega y sigue luchando. De nuevo cae Ravens al suelo, parece que definitivamente y le dice a Tarzan: "Clayton por favor ayúdeme no quiero morir aquí" alargando la mano para ser ayudado. Tarzan lo piensa pero al final le da la mano y Ravens aprovecha para hacerle una llave y lanzarlo contra una de las paredes golpeándose y cayendo medio atontado por el golpe. Ravens sale corriendo yendo a parar a una inmensa sala donde hay un trono gigantesco. Se gira y Tarzan está detrás de él mirándole. Le dice que por fin a encontrado la cuna de la civilización y que nunca nadie le creyó. Tarzan le pregunta si ha merecido la pena y Ravens se sienta en el trono lanzando al suelo el amuleto que le ha guiado hasta allí y que le robó al cadáver del padre de Kaya. A continuación, en el exterior, en lo alto de la pirámide se ha formado una tormenta que escupe rayos hacia la pirámide y por encima de Ravens aparece un haz de luz que lo envuelve. Ravens mira hacia arriba y exclama emocionado que está viendo la luz, pero pronto esa emoción se transforma en tremendo dolor pues entre el rayo de luz hay descargas eléctricas que lo van descomponiendo poco a poco hasta que solo queda su esqueleto y a continuación se produce una explosión que saca un enorme chorro de fuego hacia lo alto de la pirámide que se ve desde afuera como si escupiera una columna de fuego desde la cúspide hacia las nubes de la tormenta distribuyéndose el fuego en una explosión circular que absorbe las nubes, mientras que en el interior una explosión similar recorre algunos pasadizos. Tarzan ha salido corriendo en cuanto ha visto que Ravens se sentaba en el trono y era rodeado por la luz, pero antes de salir coge del suelo el amuleto que Ravens le quitara al padre de Kaya y cuando sale de la pirámide se encuentra con Mugambi, Jane, un par de guerreros y Kaya a quien le devuelve el amuleto. "Devuelve esto a la tumba de tu padre", le dice Tarzan. "Gracias, hemos salvado a Opar. La paz a regresado a nuestra tierra" contesta Kaya.

Tarzan y Jane sonríen y cogidos de la mano se dan la vuelta y empiezan a caminar, mientras se ve en primer plano la cara sonriente de Mugambi y la ciudad de Opar brillando como el oro entre un valle de hermosas montañas pleno de luz.

En el poblado de Mugambi resuenan los tambores y hay danzas y en la cabaña del hombre mono Tarzan le dice a Jane: "Debemos irnos". "¿Algún problema?" responde Jane. "Se preparan para una ceremonia de boda. No podemos faltar" contesta Tarzan sonriente. Jane le sonríe y arrojándose a sus brazos se besan ante la mirada de Cheetah y Tarzan dice: "Vamos Cheetah, tú serás la madrina". Tarzan y Jane abrazados y cogidos a una liana se lanzan al vacío para descender de la cabaña.

THE END

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Imágenes de mi amigo Carlos Alberto de Rosario, Santa Fé, Argentina

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